Después de la primera inmersión y antes de empezar las clases teóricas teníamos que comer. Nos llevamos unos embutiditos y como hacía malo nos montamos un picnic en la terraza del club hasta que empezó a llover y nos tuvimos que meter dentro con el salchichón y el jamón serrano, jiji.
La teoría de nitrox comenzaba con un vídeo muy al estilo PADI y luego nuestro profe Jose nos explicó, bastante mejor que el vídeo, la primera parte del curso. Una coca-cola para hacer un descanso y Jessy empezó a darnos la teoría de buceo nocturno. Los nervios por nuestra primera inmersión de noche y el cansancio acumulado, nos hacía dudar si hacerla o no, pero al final nos animamos. A las 22:30 estábamos en la isla, amarrados a una boya y a oscuras.
Nos sumergimos para empezar a una profundidad de 3 metros y aquí hubo un momento de caos, que si bajamos, que si nos subimos, que no se ve nada, que te enfoco con la linterna en los ojos, que donde está mi compañero... Después de este momento de estrés nos dimos cuenta, a pesar que la visibilidad no era demasiado buena, que bucear de noche no es para tanto. No da sensación de agobio por la oscuridad ni miedo irracional de que te ataque algo, jeje. Vimos congrios, morenas, gambas, cangrejos ermitaños, pulpos fuera de sus agujeros, un pez rata súper camuflado... y una sepia que atacó a Jessy.
Nos gustó mucho, la disfrutamos bastante. Lo único que nos quedó la sensación como si fuera la primera inmersión después del curso de buceo, estábamos un poco torpes, hay que bucear de una forma diferente, con mas material que de día, en definitiva es un buceo un poco diferente y hay que aprender de nuevo.
Para esta inmersión no me llevé la cámara, demasiadas cosas tenía en que pensar para ponerme a hacer fotos, jeje.
Fecha: 21/04/11
Club: Nisos Benidorm
Zona de inmersión: Cara Sur
Duración: 45 minutos
Prof. Máxima: 18 m
Temperatura: 17º
Consumo: 150 bar
Visibilidad: 8 m
Corriente: Baja
1 comentario:
Eso de tirarme al mar de noche me acojonaba un poco, pero la verdad es que no da nada de miedo. Me encantó ver a todos los pececillos dormidos y el pez rata camuflado era increible. Eso si iba como en mi primera inmersión, y todavía tengo que controlar un poco el foco para no dejar ciego a todo el mundo. Pero vamso que recomiendo las inmersiones nocturnas, son una pasada. Y si vas con Jessy mejor que no se le escapa un bicho.
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