Via Ferrata - Les Marujes - Tavernes de Valldigna

Una nueva actividad-afición ha llegado a nuestras vidas, jejeje, otra más...

Hace ya algunos meses Manuela me dijo que le apetecía hacer una vía ferrata. Explico que es por si alguien no lo sabe o no lo tienen muy claro. Una vía ferrata es una ruta de escalada equipada con clavos, grapas, pasamanos, puentes colgantes, para progresar por la pared de una forma bastante segura y para la que no hace falta tener unos grandes conocimientos de escalada. La forma de asegurarse es a través de un cable de acero anclado a la pared cada unos pocos metros, donde, con la ayuda de cintas y mosquetones, estaremos asegurados en todo momento. Puede ser totalmente vertical, o ser una fácil trepada, puedes pasar puentes colgantes, hacer travesías, o salvar algún desplome de la pared.

Pues por pura casualidad, en uno de nuestros destinos de estas pasadas vacaciones, Tavernes de Valldigna, Manu encontró una vía que tenía muy buena pinta, la vía ferrata se llamaba Les Marujes, equipada en 2006 por el Centre Excursionista La Valldigna.
A media mañana nos pusimos en marcha Jomer, Betty, Manu y yo. Metimos todo a las mochilas y empezamos la aproximación. La verdad es que me sorprendió la altura de estos picos, y lo chula que es esta zona para dar un paseo de montaña. El camino subía serpenteante hasta que en una de las curvas un grupo de personas parecía que comenzaban un rápel. Era el inicio de la ruta y había gente, así que tocaba esperar un poco.

Inicio de la subida hacia la vía ferrata

Camino por el que subimos

La ruta se divide en tres tramos. El primero comienza con un rápel de unos 5 metros. Es una bajada que perfectamente se puede hacer destrepando, pero que decidimos descender en rápel para coger confianza y aprender un poco de técnica. El rápel esta equipado con una pequeña reunión muy cómoda. Una vez descendida esta pequeña pared, llegabas a un corto puente tibetano montado con cable de acero. Al cruzar el puente, y para terminar este primer tramo, había una subida de unos 8 metros equipada con grapas, perfecto para la primera toma de contacto con el material.

Rápel de Betty mientras Jomer espera ya abajo

Betty pasando el puente tibetano

Jomer terminando de pasar

Manuela rapelando

Manuela a salvo al otro lado y feliz

Altura del puente tibetano

Primera subida por grapas

Fin del primer tramo

Vistas del camino de ascenso y del Tavernes de Valldigna

Después de este divertido tramo y tras un ratito andando por un camino marcado con hitos llegamos a la base del segundo tramo. Aquí también tuvimos que esperar porque una pareja decidió dar media vuelta, y como ya se sabe, en escalada es mucho más fácil subir que bajar, así que tardaron un poquito. Bueno, este tramo era bastante largo. Una pared totalmente vertical de unos 40 metros nos esperaba equipara con grapas y clavos. El primer paso es casi el más difícil de la vía. Empiezas desde un peldaño de escalera y con un poco de fuerza tienes que subir hasta la primera grapa que está un poco alta. La gente bajita lo tiene un poco mas difícil, pero como está casi en el suelo pues se hace bien, también le da un punto de dificultad el pequeño desplome con el que empieza este tramo. A la 10 grapa más o menos, otro paso largo y un pelín complicado pero que lo resolvemos sin mayor dificultad. Sigue subiendo verticalmente hasta una primera reunión desde donde se puede hacer un rápel si alguien se rila en este punto. Ahora empieza una travesía horizontal equipada con clavos un poco alejados entre si. En medio de la travesía hay una pequeña barriga de roca que dificulta la progresión. Pasado este tramo nos esperan otros 15 o 20 metros de ascensión vertical muy fáciles y divertidos y, como en el resto de este segundo tramo muy expuestos, y con mucha verticalidad.

En la base del segundo tramo

Jomer abriendo el segundo tramo

Jomer, Betty y Manu ya metidos en la vía

Mis primeros escalones

Corta travesía por clavos

Últimos 20 metros

Últimos cambios de mosquetón

Aunque no lo parece, estabamos bastante altos

El tercer tramo, el más fácil, empieza después de andar un poco sobre unas piedra que cortaban más que cuchillos. Un último tramo de 5 metros que se hace sin ninguna dificultad.
Bueno pues aquí acaba la vía ferrata de Les Marujes.

Rocas afiladas

Tercer y último tramo de la vía ferrata

¡Vía ferrata Les Marujes terminada!

Tras un pequeño descenso por otro camino diferente al de subida, mucho más bonito y con unas vistas bastante chulas, llegamos al pueblo y de vuelta a casa.

Comenzando el descenso

Vistas de la pared del sugundo tramo de la vía ferrata

Un sitio que no parece estar cerca del mar

Ha sido una nueva experiencia, me ha gustado mucho y seguro que se vuelve a repetir. Habrá que comprar algo de material para ir un poco más cómodos pero por lo general ha sido perfecto.
La ruta la encontramos en la siguiente página, la cual seguiremos de cerca a partir de ahora http://deandar.com/ferratas/via-ferrata-lesmarujes